La República Checa: Mucho más que Praga

Bienvenidos a mi pequeño proyecto dentro de una gran familia de viajantes. A mi pequeña contribución desde el país en el que ahora vivo. Bienvenidos a Callejeros travel: https://www.callejeros.travel/. La primera vez que aterricé en República Checa fue en Diciembre de 2014 para una entrevista de trabajo que pasé con éxito. Aterricé en Praga, la capital de la ahora llamada Chequia, y lo que vi me hizo aceptar la oferta y quedarme sin pensarlo. Con el tiempo descubrí que Praga es solo el escaparate de un país que tiene mucho más por descubrir, la entrada a Centro Europa. Y ahora, que después de 2 años viviendo en España, he regresado a vivir aquí, voy a hablaros de él, mostrando tanto el turismo como la vida en este país situado en el corazón de Europa. Demostrando, que la República Checa es un país que es mucho más que Praga.

Praga es una capital tan encantadora, con unos paisajes tan bonitos y con tanta historia, que el turismo del país parece centrarse en ella. La explota, robándole el encanto que tendría sin tanta aglomeración de gente, sin tantas tiendas de souvenirs, sin tanta prisa y tan poco tiempo de los que viven en ella. Como en la mayoría de las capitales turísticas, el turismo parece centrarse en ella. Pareciendo, olvidarse del resto. Para mi Praga es solo el escaparate de un país lleno de magia. Lleno de monumentos históricos, pero también de naturaleza. La puerta abierta, la entrada a un país que tiene mucho más por descubrir.

Por eso, mis primeros posts los dedico al turismo dentro de Chequia, sin olvidar por eso, empezar por la entrada al mismo, su punto de partida. Y continuando, con las que son desde mi punto de vista, sus ciudades con más encanto. Porque la República Checa es un país que es mucho más que Praga. https://www.czechtourism.com/sp/p/la-porque-visitar/

Donde el rio lleva, agua suena: de la más conocida a la no tan conocida de Chequia.

• Praga:

  Praga es conocida como la ciudad de las 100 torres o ciudad Dorada y su centro histórico es Patrimonio Natural y cultural de la Unesco. Desde una rica vida cultural que puede llevarte por la ópera, el ballet, la orquesta filarmónica. Pasando por una vida frenética llena de historia, de gentío y ruido, de rincones que te sumergen en el pasado, hasta una naturaleza que te hace relajarte y olvidarte de todo lo demás. Es romántica y bulliciosa, Praga es antigua y moderna a la vez. Desde el punto de vista histórico, no debemos perdernos un recorrido por el Ayuntamiento viejo, y esperar a las 12 en punto para ver el show del conocido reloj astronómico medieval. Desde allí, podemos ir al barrio Judio y recorrer sus calles, adentrándonos en las novelas de Franz Kafka y su antigua leyenda del Golem. El castillo de Praga también merece una visita, encontrándose en él la catedral de la capital checa.

  

  Plaza vieja de Praga al atardecer.

¿Mi lugar favorito de Praga? Donde el río lleva, agua suena.

El puente de Carlos:

El puente de Carlos es un puente lleno de historia, un puente de cuento de hadas que nunca vas a encontrarte vacío. A pesar de la muchedumbre que siempre lo frecuenta, los músicos y pintores que se asientan en él junto con el paisaje que ofrece del río, de la ciudad, su historia…nos hacen adentrarnos en un mundo lleno de magia y evadirnos de la prisa que invade la capital checa.

Este puente cuenta con 30 estatuas, mayoría copia de unos originales que se encuentran en el museo Nacional de Praga y en Vysehrad. Vysehrad, es otro de mis lugares favoritos de la ciudad, a pesar de ser muy poco conocido desde el punto de vista turístico.

Vyšehrad:

Aquí uno viene para relajarse, para disfrutar de sus preciosas vistas y naturaleza, para adentrarse en unos jardines llenos de historia. Significa Castillo en las alturas, y es sin duda, la mejor forma de disfrutar de Praga en un ambiente relajado, en una atmósfera tranquila, desde lo más alto, desde las alturas. Desde su fortaleza, sus parques llenos de bares, restaurantes y parques infantiles hasta su cementerio e iglesia de san Pedro y san Pablo, esta zona más conocida por sus habitantes que por el turismo, es sin lugar a dudas, una visita obligada dentro de la capital checa.

• Pisek

  Y dado que la República Checa es mucho más que Praga, nos adentramos en otra de sus ciudades, pero menos conocida a nivel turístico. Desde el río Vlatva que baña Praga, nos vamos al río Otava, uno de sus afluentes. Otava nos lleva a Písek, ciudad a la que baña, una bonita ciudad en la región de Bohemia del Sur de la República Checa con una población de más de 30,000 habitantes. Pisek se encuentra a aproximadamente 100 km de distancia de la capital checa y es arquitectónicamente, una de las ciudades más bellas del país.

  

  Vistas de la ciudad de Pisek bañada por el río Otava

  Písek es una ciudad conocida de forma coloquial como la Atenas de la Bohemia del Sur, dado el gran número de escuelas secundarias y de educación superior con las que cuenta. Grandes poetas, escritores, músicos, pintores… salieron de sus aulas. Entre ellas, destaca también la Escuela del Cine de Písek. Písek es historia y cultura. Cultura y tradición, cualidades que la distinguen del resto de ciudades checas.

  

  Velke namesti o Plaza Mayor en Pisek.

  Su pintoresco centro histórico medieval rodeado de callejones estrechos, nos ofrece un ambiente acogedor y único. Partiendo de la Plaza principal: Velké náměstí (Large Square) donde nos encontramos con el ayuntamiento, de estilo Barroco, pasamos por el castillo, rodeado por una zona verde y tranquila. Del castillo, solo queda en pie el ala occidental, formada por murallas medievales con 3 arcos góticos. Dentro de ella se encuentra el Museo histórico Prácheňské. Girando a la derecha nos encontramos con Sladovna o la casa de Malta, un antiguo edificio dedicado a la producción de Malta, convertido desde 2007 en un centro cultural destinado a todos los públicos, pero famoso sobretodo por su exhibición de ilustradores infantiles. Este centro cuenta además con numerosos eventos culturales.

  ¿Mi lugar favorito de Písek? De nuevo…donde el río lleva, agua suena.

  Puente de piedra (Kamenný most)

  Este puente es también el monumento más característico de la ciudad y favorito de sus residentes. Para quien visita la ciudad por primera vez, ya habiendo visto Praga antes, este puente es una versión en miniatura del puente Carlos. Otro puente de cuento de hadas, pero sin el bullicio y gentío que envuelve a Praga y con el encanto que tienen las ciudades pequeñas. Una versión en miniatura pero con la chispa que el puente Carlos pierde al estar demasiado frecuentado por el turismo. Siendo el puente más antiguo de la ahora conocida como Chequia, y el segundo más antiguo de Centro Europa, este puente invita a disfrutar del paisaje y relajarse escuchando el sonido del agua fluir dentro del río Otava.

  

  Puente de Pisek

Y de momento me quedo con estas dos ciudades, para seguir en los próximos posts hablando de otras ciudades checas conocidas y no tan conocidas. Demostrando que La República Checa es un país que es mucho más que Praga.