¡Muy buenas, callejeros! ¿No sabéis qué hacer en Girona? ¡Pues yo os traigo un buen listado de cosas para que no os aburráis y os vayáis bien satisfechos! Restaurantes, museos, sitios escondidos, tradiciones… ¡De todo!
35 cosas que hacer en Girona
1. Comer en uno de los mejores restaurantes del mundo: El Celler de Can Roca. Recuerda que hay que reservar con 11 meses de antelación. Las reservas abren el día 1 de cada mes, ¡así que ya sabes! ¡prácticamente un año para planearlo! Si no te apetece, próximamente te chivaremos algunas alternativas a la altura y más económicas 😉
2. Si no puedes ir a Can Roca, siempre te quedará la maravillosa opción de comer en el restaurante de sus padres, Montserrat i Josep. Un lugar lleno de comida rica, a buen precio y mucha, muchísima historia gastronómica. Y es que allí fue donde se criaron los hermanos Roca: Josep, Joan y Jordi. Si eres un auténtico foodie, no te pierdas este tour gastronómico, ¡está para chuparse los dedos!
3. Picar unas patatas bravas en el König, como buen gerundés. Y es que es la tapa. Y no nos referimos a las bravas, no. Son las bravas del König. Si vas a cenar con algún residente, ten por seguro que este te va a llevar al Restaurante König. Y si no te lleva, será porque ya está harto de ir. Puedes encontrar uno en la Plaza Independencia, y a no ser que haga mal tiempo, seguramente lo verás casi lleno o con cola. Bueno, bonito y barato, no sé cómo describírtelo mejor, pero si lo elijes, aciertas fijo. Las cosas como son 😉
4. Quedar en correos, también conocido como el punto de encuentro favorito de los que vivimos en la ciudad. Chicos, ¡esta es básica!
5. Recorrer la muralla y contemplar el amanecer, viendo la panorámica de la ciudad. Y si no es el amanecer, no pasa nada, pero la muralla… ¡Date el gusto de recórrela toda!
6. Subir a Montjuic y hacer lo mismo. ¡Menudas vistas tienes desde lo alto de la colina!
7. Comer un helado en Rocambolesc. Sí, volvemos a los hermanos Roca, y es que también tienen una heladería en la calle Santa Clara (cerca de plaza Independencia). La idea principal era ir repartiendo postres dulces por todas las calles de Girona, empujando un carro ambulante, pero la normativa de la ciudad les obligó a aparcar el carro y montar una tienda. Los helados están muy ricos, pero no es la heladería más visitada por los gerundenses (para eso tendrás que saltar al siguiente punto).
8. Comer un helado en la Gioconda o en el Dino. No os voy a engañar, si queréis helados buenos, ricos y baratos, estas dos heladerías son un must. De las todas las que hay en la ciudad, la Gioconda y Dino ofrecen una gran variedad de sabores y están en pleno centro (la primera en Plaza Cataluña y la segunda en medio de la rambla). Ahí es donde vais a encontrar a los residentes y no tantos turistas como en la heladería de los Roca.
9. Dar la vuelta a la Devesa… ¡Corriendo! Y es que la Devesa es el pulmón de la ciudad, y da gusto pasear por ella. Eso sí, encontraréis a muchos que la recorren trotando o a tope y, si vosotros también queréis aprovechar para salir a correr, no hay mejor lugar para hacerlo.

Parque de La Devesa
10. Ir al mercado de la Devesa. Abre los martes y los sábados, y es como cualquier mercado de pueblo, ¡solo que más grande y en medio de un bosque!
11. Ir al Mercat del Lleó. Se trata del mercado de la ciudad. Abre todos los días menos el domingo, y encontrarás más de 150 paradas de productos frescos.
12. Colarte en la facultad de letras de la Universidad de Girona y admirar el claustro. Sabemos que vas a visitar toooodo lo que te salga en la guía (Catedral, Baños Árabes, Barrio Judío…), pero que sepas que detrás de la fachada de la facultad de letras hay el claustro gótico del antiguo convento de Sant Domènec (1253), un lugar prestigioso, y definitivamente uno de los sitios con mayor valor histórico y artístico de la ciudad.
13. Perderte por las calles del Barri Vell. Sabemos que esta la vas a hacer sí o sí. Y es que las callejuelas de la zona antigua te hacen olvidar que estás en una ciudad, para llevarte a un pueblecillo con mucho encanto.
14. Ir a la plaza más pequeña de Europa. Sí, has leído bien. ¡Tenemos la plaza más pequeña de Europa! Y sólo te va a tomar 5 minutos ir a verla, porque está justo detrás de la Rambla. Hablamos de la Plaça dels Raïms (Plaza de las Uvas), y se llama así porque antiguamente había un pequeño mercado de uvas.
15. Hacerte una foto en los sitios donde se rodó Juego de Tronos. Porque… ¿Sabes que aquí se rodó Juego de Tronos, verdad? ¡Así es! Uno de los sitios más importantes de la ciudad, la Catedral, fue el escenario de la serie. Lee más curiosidades sobre la Catedral de Girona aquí.
16. ¡Comer xuxos! Es el dulce típico de la provincia, y ¡está claro que no te puedes ir sin probarlo!
17. Dar un beso al culo de la leona. Bueno… O no… Es tradición. Cuenta la leyenda que si le besas el culo tarde o temprano volverás a la ciudad. Menuda creencia, ¿eh?
18. Ir en busca de los emoticonos (sí, has leído bien) que hay escondidos por las aceras de la ciudad. Os sorprenderá, pero como residente yo aun no sé de dónde han salido los emojis y quién los ha puesto ahí, ni con qué intención. Aun sigo encontrándome de vez en cuando alguno nuevo, y es que, si os fijáis en las aceras, ¡están repartidos por toda la ciudad!

Uno de los emoticonos que encontré en una acera de Girona.
19. Ir en busca de las esculturas de cada leyenda: la bruja de la catedral, el vampiro de la rambla, la huella de Sant Narcís, etc. ¡hay para escoger! Pronto os traeré una recopilación de mis leyendas favoritas (¡Hay más de 40!).
20. Tomar unas cañas en plaza independencia. Otro básico. En esta plaza es donde está el ambiente, ¡por si os interesa…!
21. Subir a Montilivi y ver jugar al Girona FC. Lo del fútbol es, para mí, una excusa, pero a aquellos que les guste van a disfrutar de su alrededor. Y es que Montilivi es la zona universitaria que está apartada del centro, ¡y está lleeeeena de verde!
22. Hacer el carrilet en bicicleta, ¡a ver hasta dónde llegas! Si lo de correr no te va, tal vez la Devesa se te queda corta para hacerla en bicicleta, así que te recomendamos el carrilet, la vía verde de la ciudad, donde puedes hacer ruta hasta Olot, si quieres.
23. Museo del cine. El primer museo de tooodo el estado español que se dedicó a la historia del cine. Por ende, la calidad y cantidad de piezas que tiene es maravillosa, y definitivamente para incluirla en tu visita a la ciudad.
24. Si os gusta el cine, a parte del museo mencionado os recomendamos el Cinema Truffaut, uno de los pocos cines que quedan para ver películas en versión original. Tienen muy pocas, pero los estrenos son contínuos y es ideal si no quieres conformarte con una película comercial, aunque ¡también tenemos cines para eso ehh! 😉
25. Al inicio del post os he adelantado que os recomendaría próximamente, en un blog distinto, un montón de restaurantes, pero es que no me puedo esperar. Al menos, os voy a recomendar uno de mis favoritos ya: El Cul del Món. (El culo del mundo jejejeje). Y es que me encanta. Cocina de proximidad, a las afueras, con un nombre que da gusto decir, con un ambiente muy romántico… Cocina diferente, de alta calidad y a muy buen precio. Si te apetece tener una buena noche de cita romántica, ¡este es tu restaurante!
26. Pasar por el puente… Eiffel. ¡Sí! ¡Eiffel! ¡El mismo de la torre! Y es que en Girona tenemos el honor de tener un puente construido por el mismísimo Gustave Eiffel, y aunque muchos lo llaman Pont de les Peixeteries Velles, si preguntáis por el puente de hierro o el puente Eiffel todo el mundo sabrá ubicároslo.
27. Darle un beso a alguien especial debajo de las luces que hay en medio del puente dedicado a Miquel Gomez. Y, si te atreves, cruzar el mismo puente ¡saltando!

Puente dedicado a Miquel Gomez
28. Tomar un café en Le Birstrot, considerado el rincón más romántico de España entera (y no lo digo yo, sino que lo dice una encuesta que hizo Correos a todos sus usuarios). Se encuentra ubicado en las famosas escaleras de San Martín, y también es comúnmente conocido como el sitio donde tomó el café Mark Zuckerberg, fundador de Facebook, cuando visitó la ciudad. Es un sitio lleno de bohemia y encanto.
29. Te quedarás encantado con las casas del Onyar, pero… ¿te apetece entrar a una de ellas? Os hablo de la Casa Masó, que fue hogar del arquitecto Rafael Masó i Valentí, y que se puede visitar por un módico precio de 6€. Está llena de detalles y formas geométricas que te llevan a otros tiempos y te dejará hechizado.
30. Pasea por las ramblas. Eeeeesta sé que la vas a hacer, porque puestos a pasear, ahí es donde vas a ir a parar si cruzas el Pont Eiffel, si cruzas el Pont de Pedra, si vuelves de la Plaça del Raïm… ¡Si es que Girona tiene muchas cosas por ver, pero también es muy pequeña! Y las ramblas lo conectan prácticamente todo.
31. Tomate una foto con las casas del Onyar de fondo. Hay varias opciones, pero a mí me mola bastante la foto que se hace des del puente Eiffel, con los barrotes rojos emarcando la catedral… ¡Epa! ¡Que me voy! La foto de las casas mejor des del Puente de Sant Agustí, que conecta la plaza independencia con la Rambla.
32. Pasa por el Pont de Pedra. Ya te lo hemos adelantado, pero es que los puentes en esta ciudad son muuuuy puentes, y muy importantes para nosotros. El Pont de Pedra es el único puente de la ciudad que está hecho de piedra, como bien indica su nombre, y conecta la calle Santa Clara y la calle Nou con la Rambla. Cruzando el río dejas atrás la parte nueva de la ciudad, encontrándote con la parte vieja.
33. Si te van los museos, esta es también tu ciudad. Los museos de Girona están muy ligados a la historia de esta, y eso hace que puedas disfrutar aun más de la ciudad, ¡porque tienes la posibilidad de aprender muchísimo sobre esta! No te conformes, por ejemplo, con solamente ir al barrio judío: aprovecha y visita el Museo de la Historia de los Judíos y descubre su historia en la ciudad. Girona está llena de patrimonio muy valioso, y los museos le hacen justicia. Descubre más sobre la historia de los judíos y la huella que dejaron en la ciudad en este tour que recorre el barrio.

Museo de la Historia de los Judíos
34. Perderte por los jardines que hay cerca de la muralla. Els Jardins dels Alemanys, el Jardí de la Jueva, el Jardí de la Francesa… ¡Hay hasta un jardín dedicado a John Lenon! Cada uno tiene su historia y su algo que lo hace único…
La historia de los jardines de la francesa, por ejemplo, cuenta que un arzobispo conoció a una francesa y se enamoró de ella al instante. Queriendo ser correspondido, la invitó a cenar algo típico catalán, y mandó a su criada a cocinar butifarras para la cena. La criada, celosa, utilizó azúcar en lugar de sal para hacer las butifarras, intentando sabotear la cena. Para su asombro, aunque las butifarras no fueron del gusto del arzobispo, ¡el plato encantó a la francesa! y desde entonces los jardines fueron dedicados a ella. Como curiosidad, deciros que las butifarras dulces son también típicas de nuestra cocina, y tienen, a partes iguales, aquellos quien las devoran y quienes las aborrecen.
35. La última cosa que te recomiendo es que te pierdas y descubras más y más. Porque ni un listado de 100 cosas te podría ayudar a disfrutar del todo si no te dejas ir y te relajas. ¡Venga! ¡Ya estás listo/a! ¡Disfruta de tu visita!
Y esto es todo amigos. Ya sabéis qué hacer en Girona. Como véis, es un buen listado de cosas, ¡así que a ponerse en marcha! Definitivamente Girona es una ciudad que ofrece mucho. Si quieres sacarle más partido aun, sigue atento a todo lo que publicamos sobre la provincia aquí. ¡Hasta pronto!
4 comments
Ufffff m’ha vingut a la memòria un munt de coses. He nascut al barri de Pedret, anaba a l’escola de les monjes de la catedral i….., els pares Roca són molt amics meus. Gràcies per fer que recordi moltes coses viscudes ?
Gràcies a tu, Anna! La veritat és que he deixat de fer moltes d’aquestes coses i també m’ha portat molts bons records el fet d’escriure aquest article. He tingut aquesta inèrcia de sortir de casa i fer els volts que fa tant que no faig!
Muchas gracias por el tour turístico mis próximas vacaciones serán por Gerona… Que aunque naci aquí es impresionante lo que me queda por descubrir gracias bonita…
¡Gracias Lourdes!