¿Sabías que hay un único lugar en el planeta estadísticamente percibido como conocido por todo el mundo, lo haya o no pisado? Me refiero nada más y nada menos que al metro de Nueva York. Los relatos e imágenes que allí han acontecido y se viven diariamente, están curiosamente en el imaginario social de casi cualquier ciudadano, de casi cualquier país. Sin embargo, hay secretos que nadie te ha contado. Pero no te preocupes, este post hará que te sumerjas de verdad en las entrañas del “subway”, y es que, hay aspectos interesantísimos que podrás descubrir y salpicarán tu viaje de matices únicos.
Voy a desvelarte su apasionante historia, las curiosidades más remotas y sugestivas, lo que te puedes encontrar bajo el suelo neoyorquino, las estaciones icónicas o secretas, las legendarias películas “Made in subway” y toda aquella información de interés, que te será de gran utilidad en tu aventura por la metrópoli influyente.
El metro con más estaciones del mundo, supone un reclamo en sí mismo, para todo aquel que visita la ciudad de Nueva York. Conocer más sobre este foco de capital interés, supondrá un plus a la hora de optimizar tus jornadas, a la par que te aportará conceptos insignes sobre la city.

Metro de Nueva York
Dicen que es la sangre que corre por el cuerpo de Nueva York…y es que, no en vano, sus andenes han visto bailar a Gene Kelly y Fran Sinatra, rodar películas de acción trepidantes, esperar la llegada del tren a los más míticos personajes y tocar a músicos callejeros que luego han acabo por triunfar de manera internacional.
El metro que nunca duerme conforma las arterias de un emporio, que tampoco lo hace y con casi siglo y cuarto de vida, sigue bombeando fuerte y sacudiendo a la urbe de estampas señeras. A partir de ahora para ti, ya no serán furtivas. El próximo tren está en el «platform» ¿Lo cogemos?
HISTORIA DEL METRO MÁS GRANDE DEL MUNDO
Primeros pasos
La ciudad que sirve de corazón al planeta y su metro, han vivido desde los inicios hasta el día de hoy, la divergencia entre años de gran depresión y las etapas de esplendor más puro, algo que sin duda, forjó el carácter que hoy se respira en todo el conjunto de la metrópoli. La historia del metro de Nueva York se remonta a 1904, aunque la primera línea elevada se abrió 35 años antes.
Oficialmente, la obra comenzó en 1900 y en ella trabajaron con tesón, cerca de 12000 obreros anónimos, aunque destacaron personajes clave a lo largo del proyecto. Se puede decir que no fue sencillo, ya que, durante varias etapas primaron los intereses económicos y políticos, que dificultando el avance. Nueva York contaba entonces con 3,5 millones de habitantes, concentrados principalmente en Manhattan, la mayoría de los cuales, casi cada día, empleaban mucho tiempo en desplazarse, algo que no podían obviar.
Esto, dejaba la ciudad a la cola de capitales importantes, que contaban ya con medios de transporte más ágiles. Punto clave, sin duda, para que los dirigentes comprendieran que, era primordial dotar a la city de una red de metro competitiva, ya que gran parte del éxito comercial de la ciudad dependía de ello.
El eslogan con el que echó a andar el primer tren fue “De City Hall a Harlem en 15 minutos”, ese mismo día lo usaron 150.000 personas que pagaron un níquel (5 céntimos) por desplazamiento, cuyo precio se mantuvo durante 42 años. Comenzaba entonces un periodo mágico para la ingeniería civil. En dicha época, las líneas estaban agrupadas en dos sistemas de propiedad privada, llamadas entonces: Brooklyn Rapid Transit Company e Interborough Rapid Trasit Company.
Crecimiento progresivo
Mientras la urbe crecía en altura, ampliaba también sus tentáculos bajo el subsuelo. En 1905 la red se expandía hacia el Bronx, en 1908 hacia Brooklyn y en 1915 hacia Queens. Para entonces, las líneas pasaron a ser construidas por el Ayuntamiento y alquiladas a compañías. La primera línea operada por el sistema de metro independiente, propiedad municipal, se inauguró en 1932, con los tramos hacia Harlem. Para 1936, la mayor parte de la red ya estaba construida.Tras una década, el metro de Nueva York, ya era utilizado por ocho millones de personas, curiosamente, casi el doble de los viajeros en la actualidad.

Punto de venta múltiples líneas
De la oscuridad a la luz
A finales de los años sesenta, el sistema de transporte subterráneo entró en declive, haciéndose famoso por el crimen y las pintadas en vagones. A comienzos de los ochenta era notoria la recurrencia de averías y los avisos de fuera de servicio en hora punta, algo que continuó afectando negativamente.

Metro de Nueva York en 1982
Hasta que los problemas y sus consecuencias hicieron que la Metropolitam Transportation Authority, interviniera y apostara por su rehabilitación. El saneamiento de metro, fue paralelo al propio renacer de una ciudad venida a menos. Es importante señalar en este punto a Rudolf Giulliani (antiguo alcalde) como precursor de tan esperados cambios. Algunos historiadores señalan que la forma en la que se ha desarrollado Manhattan, es producto del avance en la red subterránea.
Actualmente, el metro de Nueva York, traquetea, se balancea más de lo deseado, no siempre está limpio, pero es totalmente fiable. La afluencia de viajeros da fe de ello, ya que, por ejemplo, los pasajeros de sólo tres líneas, que lo cogen a diario, duplican a los que utilizan el subterráneo en Chicago y Boston juntos.

Afluencia de viajeros en hora punta
Como si se tratara de un queso “gruyere”, los planes para seguir agujereando el suelo de Manhathan están sobre la mesa casi de manera permanente, para dar respiro a la sobrecarga. Con lo cual, podemos decir que, al igual que en la superficie, el crecimiento del “tren subyacente” no tiene límites.
CURIOSIDADES BAJO EL SUELO NEOYORQUINO
Los extremos hacen de Nueva York una ciudad especial, algo que puede observarse tanto a nivel exterior como bajo el suelo de esta trepidante jaula de asfalto. Ese contraste se aprecia efectivamente también en el metro, cuando la locura dentro y fuera de los vagones, domina los túneles en hora punta, mientras se respira paz al vislumbrar la silueta de Manhattan transcurriendo por los tramos de tren elevado en Brooklyn o Queens.

Tren elevado por el puente de Williamsburg
Te confirmo que, el metro de Nueva York es cuanto menos curioso y a su vez está plagado de apuntes anecdóticos. Resulta clave disfrutar de al menos un trayecto, para conocer como respira realmente la ciudad, con lo cual, irse de ella sin asomarse a sus muelles, sería como hacer una visita de puntillas.

Un día cualquiera en el metro de Nueva York
Pues bien, es hora de chivarte algunos de los talantes que conforman curiosidades de este loco mundo entre railes, llamado metro de Nueva York. Ahí van:
- Todas las líneas pasan por Manhattan excepto una. La ruta Local G, de Brooklyn a Queens. Así que, si te alojas en pleno centro, no tienes excusa para bajar a las profundidades.
- Muestra un museo bajo tierra. «Art for Transit» es un proyecto artístico que funciona en el metro de Nueva York desde 1985 y sin duda, lo ha llenado de color.
- Es el mayor sistema de transporte de Estados Unidos y el más usado.
- Sufre inundaciones de manera habitual.
- Algunos de los pasajeros con los que te vas a encontrar si o si son roedores. Y es que las ratas parece que forman parte del entramado, pero conviven pacíficamente, con los miles de personas que cada día esperan en los andenes.
- Se pueden escuchar hasta 120 idiomas, en sus vagones. Si sí, has leído bien. ¿Puede haber un lugar más cosmopolita?
- Tiene un 40 por ciento de líneas exteriores, eso te facilita ver la ciudad desde otra perspectiva y avistar lugares, por los que seguramente no pasarías a pie.
- Se dice que con el consumo de energía del metro de Nueva York, se podría abastecer a una ciudad de 300 mil habitantes.
ESTACIONES CON PARADA OBLIGATORIA
El metro de Nueva York, es un sistema de transito rápido que abarca los cinco “boroughs” y cuenta con un total de 24 líneas y 468 estaciones. Evidentemente no podrás conocerlas todas en tu viaje, pero tampoco haría falta, puesto que el cien por cien, no merece una visita exclusiva.

Estación de Columbia University
Sin embargo, me parece importante destacar algunas en las que si te sugeriría que fueras expresamente o al menos lo intentaras. Serían las siguientes:
City Hall
Es la parada secreta menos secreta. Encontrarás una preciosa estación curvada diseñada por un arquitecto español, el valenciano Rafael Guastavino. Consta de bóvedas alicatadas con azulejos y claraboyas que permiten la entrada de luz natural. Esta catalogada como una de las más bellas del mundo.
Times Square
Además de ser una estación estratégica, Times Square, incluye un maravilloso mural mosaico de Roy Linchtenstein, que no te puedes perder.
Uptown Manhattan- 190th Street
En el barrio de Hudson Heights, es posible adentrarse en la roca de Manhattan, a través de esta estación de metro, la más profunda de la ciudad, que es un monumento en sí misma. Los ascensores dan acceso a la misma y a Bennet Avenue, debajo de los acantilados.
Prospect Heighs- Dowtown Brooklyn- Frankin Avenue Shuttle
Esta pintoresca estación, resulta curiosa también, porque además, hace las veces de lanzadera. Es la zona más antigua del servicio de transporte subterráneo y recorre uno de los parques más bonitos de la ciudad.

Avenida Shuttle
Gowanus, Carroll Gardens – Sminth- Ninth Street- Linea Culver
Aquí encontrarás una peculiar estación al aire libre, situada en un antiguo canal, cuyos barcos debían tener una altura determinada para poder pasar bajo las vías. Hoy día, regala unas espectaculares vistas del horizonte neoyorquino.
Midtown West- 34 th Street- Hudson Yards- Linea Flushing
Es una estación relativamente nueva, que cuenta con un moderno diseño y un impactante mural- mosaico en el techo, con multitud de colores que te dejaran con la boca abierta.Los alrededores de Hudson Yards, son realmente maravillosos.
INOLVIDABLES PELÍCULAS “MADE IN SUBWAY”
El metro de Nueva York, ha sido y es, protagonista recurrente, en mayor o menor medida, de cientos de películas. Esto lo ha expuesto al mundo, situándolo tras un escaparate privilegiado. Cierto es que, el cine le ha otorgado enorme visibilidad y gloria, pero en ocasiones le ha prestado una fama poco amable, que no le ha favorecido para nada.

Andenes de cine
Muchísimas de estos largometrajes son archiconocidos, otros sin embargo, han tenido una menor cobertura de publico, pero exhiben de igual manera su esencia. La lista es prácticamente infinita, con lo cual, se hacía necesaria una selección prudente. Así que, si te gusta el cine y tu curiosidad por la misteriosa red subterránea neoyorquina, va en aumento, no te puedes perder estas recomendaciones:
Fiebre del Sábado noche; Las Tortugas Ninja; The French Connection; The Warriors; Los amos de la noche; Spider-Man 2; Asalto al tren del dinero; Pelham 123; Vestida para matar; Los Cazafantasmas 2; Ghost: Más allá del amor; Atrapado por su pasado; Deseos culpables…

Vagones de cine
INFORMACIÓN PRÁCTICA
En primer lugar, tienes que saber es que el metro de Nueva York abre de lunes a domingo, las 24 horas y los 365 días del año. Lo cogerás evidentemente, en la época en la que viajes a Nueva York, haga calor o frío, ya te he contado alguna vez que el tiempo aquí, tiene sus extremos. Mi consejo inicial, es que si puedes, evites abusar de este medio de transporte en verano, resulta realmente agobiante por las altas temperaturas en los andenes y por el contrario, el frio dentro, resulta inaguantable. Has de saber también que hay diferentes tarifas, ten presente que billete vale 3$, con Metro- Card 2,75$, aunque te costará 1$ adquirirla, una primera y única vez.

Downtown & Brooklyn
Perderse es su laberíntico entramado es aparentemente sencillo, sin embargo, hay pequeños trucos que harán más llano viajar a través de sus railes:
- Asegúrate de mirar, en la boca de metro, si pone “Uptown” o “Downtown”, dependiendo del sentido al que desees desplazarte, ya que esto te evitará equivocaciones. Hay entradas que van directas a los andenes de una u otra dirección y si te confundes, tendrás que volver a pagar.
- Ratifica que tomas la línea adecuada. El enjambre de gráficos se riza aún más cuando describes que también tienes que escoger entre exprés o local, ante la duda, siempre local, ¡no lo olvides!
- No viajes sin descargarte un plano o alguna de las muchas apps que te ayudarán, como no te imaginas, a la hora de ubicarte.
- Consulta siempre la última parada de la línea, ya que una misma línea puede bifurcarse, por ello se indica la estación final siempre.
- Cerciórate de mirar los paneles antes de tomar el tren, ya que por una misma vía, transcurren convoyes a diferentes destinos.
- Si vas con maletas, carrito de bebé… ten presente que la accesibilidad no es el punto fuerte del metro de Nueva York. Consulta cuales son las contadas estaciones con ascensor.